SOLTI: “Hay que asegurar la vacunación a los pacientes con cáncer y restaurar los programas de cribado en todo el país”

La pandemia de la COVID-19 ha afectado el número de diagnósticos de cáncer en muchos países.

El grupo cooperativo de investigación oncológica, SOLTI, reivindica la necesidad de mantener los programas de cribado y la vacunación a los pacientes oncológicos de mayor riesgo

El número de ensayos clínicos activos e inclusiones de pacientes en 2020 fue similar al de 2019

Barcelona, 3 de febrero de 2021 – La pandemia de la COVID-19 ha demorado los diagnósticos de nuevos casos de cáncer a escala mundial y, en el caso concreto de España, la mayor consecuencia observada es el incremento significativo de los diagnósticos en estadios más avanzados de le enfermedad, III-IV con metástasis al debut. Según datos del Informe “Las cifras del cáncer 2021” de la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM),  los tumores más frecuentemente diagnosticados en el mundo en el año 2020 fueron los de mama (que ocupa la primera posición), pulmón, colon y recto, próstata y estómago.

Durante este último año en los hospitales españoles ha habido un descenso de hasta un 20% en el diagnóstico de nuevos casos de cáncer. De cada 100 pacientes que un hospital diagnosticaba, se han dejado de diagnosticar 20, que son pacientes que ahora mismo tienen la enfermedad y no lo saben o lo sabrán dentro de unos meses. Esta es una de las principales consecuencias de la pandemia, el retraso en los programas de cribado de cáncer, aunque, aseguran los expertos, “en la segunda y tercera ola no se han parado ni el cribado ni las cirugías oncológicas como ocurrió en la primera”. Un primer análisis indica que el retraso se debió, en primer lugar, a una sobresaturación de los profesionales dedicados, casi en exclusiva, a cubrir necesidades por la COVID y, en segundo, al miedo generalizado de la población a salir de casa. El resultado, apunta el Dr. Aleix Prat, Presidente de SOLTI “nos plantea un escenario complicado éste y los próximos años porque los diagnósticos se realizarán en fases más avanzadas, con peores pronósticos y una mortalidad más elevada”.

Por su parte, la vicepresidenta de SOLTI, la Dra. Eva Ciruelos, oncóloga del Hospital 12 de Octubre de Madrid confía en que a “lo largo del 2021 tengamos acceso a las vacunas y se consiga la inmunidad colectiva. Espero también, que a lo largo de este año, recuperemos la normalidad en los hospitales de día y en las consultas oncológicas y se restauren los programas de detección de precoz de cáncer de mama, por supuesto,  que se recupere la actividad normal de los quirófanos que a día de hoy están al 50% de rendimiento. Tengo toda la esperanza puesta en la ciencia como no podría ser de otra forma”.

Por esto, ahora “es fundamental priorizar las cirugías oncológicas y la asistencia a los tratamientos y a los ensayos clínicos manteniendo todas las medidas de seguridad y precaución que hemos aprendido en los últimos meses, apunta la Dra. Cristina Saura, oncóloga del Hospital Vall d’Hebron de Barcelona y vocal de la Junta Directiva de SOLTI.

El presente año 2021 estará marcado por el hito de la vacunación progresiva de la población, un hecho que tiene que traducirse en un descenso significativo de los contagios y de los casos de enfermedad grave. Asimismo, habría que observarse un descenso de la presión asistencial para recuperar la actividad médica habitual y dejar de exigir un sobreesfuerzo a los profesionales sanitarios. En concreto, una de las acciones que se recomienda abordar es priorizar la vacunación de los enfermos oncológicos, sobre todo aquellos con mayor riesgo de contagiarse, es decir, en tratamiento activo, cáncer avanzado y/o diagnóstico de cáncer en el último año. De su totalidad, son especialmente susceptibles a la enfermedad grave por COVID-19 los pacientes con cáncer de pulmón y cáncer hematológico. En consecuencia, habría que distinguir a éstos de los pacientes con antecedentes de cáncer de años atrás o largos supervivientes sin tratamientos inmunosupresores. Con esta distinción se aseguraría el acceso a la vacunación a los de mayor riesgo.

En este contexto, la función de los oncólogos es asegurar que los pacientes estén informados sobre la seguridad y la eficacia de las vacunas y su capacidad para desarrollar una respuesta inmune, así como determinar el mejor momento para vacunarles. Aunque todavía no se dispone de datos prospectivos, apunta la Dra. Meritxell Bellet, oncóloga del Hospital Vall d’Hebron y vocal de SOLTI “podemos anticipar que con la vacuna de la COVID veremos una efectividad y respuesta inmune suficiente para un gran número de pacientes con cáncer en base a la experiencia con otras vacunas como la de la gripe”

Recuperar la normalidad

Actualmente, la actividad asistencial, en visitas, tratamientos y seguimiento de pacientes, ha recuperado la normalidad y se mantienen las consultas telemáticas, aunque “en cáncer de mama intentamos minimizar éstas últimas porque es muy importante la exploración clínica” asegura la Dra. Bellet. Sin embargo, en estos momentos muchas pacientes solicitan que las visitas de seguimiento sean telefónicas o telemáticas para evitar la exposición y los desplazamientos a los hospitales respectivos. Sin duda,  la actividad presencial seguirá siendo muy importante,  pero la pandemia ha confirmado que “la telemedicina es una opción eficiente con un alto grado de satisfacción porque hay determinados perfiles de pacientes que se pueden beneficiar mucho de este sistema e incluso ya existe la opción de enviar la medicación directamente desde la farmacia del hospital al domicilio” según afirma la Dra. Montserrat Muñoz, oncóloga médico del Hospital Clínic de Barcelona y vocal de la Junta Directiva de SOLTI. 

En el ámbito de la investigación oncológica, un recuento aproximado indica que el número de ensayos clínicos activos e inclusiones de pacientes en 2020 fue similar al de 2019 aunque, apunta el Dr. Aleix Prat, Presidente de SOLTI y Jefe del Servicio de Oncología Médica del Hospital Clínic de Barcelona “la investigación traslacional se ha visto muy afectada por la pandemia ya que, si ya partíamos de serias dificultades de financiación, sobre todo pública, con la pandemia esta situación todavía se ha agravado más. Ahora la cuestión es ver cómo nos recuperamos, aunque lo cierto es que estamos en un país que no cree en la investigación clínica y traslacional en Oncología”.

En este sentido, 2021 debería ser un año dedicado a recuperar la capacidad al 100% de los diagnósticos poblacionales y a destinar mayor inversión a la investigación, porque como se ha visto con la COVID, “la colaboración público-privada hará que podamos tirar adelante de la forma más rápida posible, como nos confirma el hecho de que hemos sido capaces de desarrollar una vacuna en menos de 12 meses”, concluye el Dr. Prat.

Por y para ello, desde SOLTI reivindicamos la importancia de seguir investigando para encontrar más y mejores tratamientos para los pacientes con cáncer. Además, apostamos por la divulgación científica y muestra de ello es que, a pesar de la pandemia, mantuvimos nuestro ENVISION SUMMIT, una reunión científica anual en la que reunimos a profesionales de primer nivel para reflexionar sobre el futuro y los principales retos de la investigación oncológica.

Enlace al ENVISION Summit SOLTI 2020: https://youtu.be/1FPwCgLiP1M

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